De este centro de estudios han salido varias promociones de alumnos. El crecimiento demográfico de la ciudad obligó a abandonar esas históricas instalaciones de madera, que tuvo como vecinas otras casonas también de madera, al estilo colonial que caracterizaba a nuestro puerto.
El día lunes 1ro de abril del año 1923, abrió sus puertas el Colegio Nacional "Augusto B. Leguía", satisfaciendo así un viejo anhelo de los padres de familia que, año tras año, venían solicitando y clamando se estableciera un colegio de educación secundaria, en nuestro puerto.
Desde 1912, Don Nazario Riglos, ya como concejal y después como alcalde, trabajó intensamente en la conciencia de los hombres representativos de Arequipa y Mollendo, para que se hiciera funcionar un establecimiento de esta clase, pero el resultado fue siempre negativo y había que seguir esperando.
En 1922, un artesano y sastre muy hábil y con gran personalidad, Don Manuel Montoya, deseoso de ver prosperar al pueblo donde él y los suyos habitaban, hizo preparar un memorial dirigido al Sr. Presidente de la República, solicitando la creación y funcionamiento de un Colegio Nacional y anduvo de puerta en puerta recabando firmas y adhesión. Posteriormente se envió el memorial al Sr. Ministro de Instrucción y a los representantes por el departamento.
Hubo de esperarse no mucho tiempo, pues Don José Antonio Bedoya, diputado regional por la provincia de Islay, hizo suya la petición mollendina, trabajando intensamente para que la misma se haga realidad. El 28 de octubre de 1922, se expidió la Resolución Suprema Nº 927 que decretaba la creación del Colegio Nacional de educación secundaria para Mollendo, que acogió el nombre del entonces Presidente de la República.
Este centro educativo siguió los embates de la política, baja y mezquina en la generalidad de los casos. Cambió de nombre y de objeto al fusionarse el 12 de junio de 1926 con el Instituto Comercial A. B. Leguía, creado ya en febrero del mismo año por Resolución Directoral Nº 259. En 1937 tomó la denominación, justiciera y adecuada, de "Deán Valdivia". En 1965 adquirió la categoría de Gran Unidad Escolar.
Desde 1956, dejando el antiguo local de madera de la calle Comercio, funciona en un edificio moderno de material noble construído sobre un extenso terreno obsequiado por Don Juan J. Koster Vargas, obras que fueron dirigidas por el Ing. Fernando Croveto, ex-alumno dean valdiviano.
El primer director fue el Sr. Luis A. Bouroncle, educador de reconocida solvencia moral y pedagógica. Egresaron muchos de los hombres representativos de la banca y el comercio y que, no encontrando futuro en el mismo Mollendo, emigraron a otros lugares del país y del extranjero, sobresaliendo gracias a su esfuerzo y a la sólida preparación que obtuvieron en el Colegio Nacional, bajo la dirección de ese gran maestro cuyo nombre está perennizado en una de las calles de la ciudad.
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